easyJet, la aerolínea de tarifas económicas en Europa, ha publicado hoy un estudio que desvela que el deseo de convertirse en piloto es más tardío en niñas que en niños. Más de la mitad de pilotos masculinos (55%) participantes en el estudio han afirmado que a la edad de 10 años ya tenían claro su futuro profesional. El 22% de los pilotos a la temprana edad de 5 años ya se imaginaban volando aviones. Si miramos los resultados de sus compañeras de profesión la decisión de convertirse en piloto no llega hasta los 16 años.
El estudio realizado por Join the Dots con una muestra de 556 pilotos, 59 de los cuales eran mujeres de distintas edades participantes en la iniciativa Amy Johnson de easyJet, ha reconocido el esfuerzo de la aerolínea británica en incentivar a que más mujeres enfoquen su futuro profesional en el mundo de la aviación, ayudando a la normalización y la igualdad de género.
La investigación también ha revelado que las experiencias ocurridas durante la niñez, como tener a familiares o conocidos en el mundo de la aviación o haber tenido la oportunidad de visitar la cabina de vuelo durante algún viaje, han sido vitales para inspirarles en considerar la carrera de piloto. Asimismo, tanto hombres como mujeres piloto están de acuerdo que la manera más efectiva de normalizar esta profesión en términos de igualdad de género es mediante el trabajo conjunto con escuelas o grupos para jóvenes
Algunas mujeres piloto que participaron en el estudio han señalado que han recibido comentarios desalentadores basados en su género y que, en la sociedad actual, la profesión de piloto se sigue percibiendo como una “profesión de hombres”.
Desde el lanzamiento de la iniciativa Amy Johnson en 2015, easyJet ha trabajado en la normalización de género de este trabajo. Más de 140 mujeres piloto han visitado diferentes escuelas para dar a conocer su trabajo y, sobretodo, hacerles saber a todas las niñas que sueñan con volar aviones algún día que si quieren, pueden. Sin importar lo que digan los modelos sociales.
David Morgan, Director de operaciones de vuelo en easyJet, ha comentado:
“En easyJet valoramos la diversidad y aspiramos a que nuestros empleados sean un reflejo de nuestros clientes. La iniciativa Amy Johnson busca atraer talento e inspirar a las nuevas generaciones de mujeres a enfocar su futuro profesional en el mundo de la aviación. Los resultados del estudio nos ayudan a identificar qué podemos hacer para seguir normalizando el papel de la mujer en esta profesión y animar a que más mujeres valoren su futuro profesional en el mundo de la aviación”.
Capitán Marnie Munns, piloto responsable de la iniciativa Amy Johnson, ha señalado:
“La iniciativa Amy Johnson busca no solo animar a mujeres adultas a que valoren la aviación como futuro profesional sino también inspirar a las nuevas generaciones. Ese trabajo pasa por cambiar los modelos a seguir de la sociedad actual mediante campañas de concienciación en las escuelas. Nuestro reto es que para las nuevas generaciones una mujer piloto sea percibido como algo normal y no como un caso excepcional como ocurre en la actualidad”.
En un momento en que solo el 4% de los pilotos a nivel mundial son mujeres, según datos de la Sociedad Internacional de Mujeres Piloto, en easyJet nos orgullece poder dar la bienvenida cada año a mujeres piloto gracias a la iniciativa Amy Johnson. La aerolínea británica aumentó en un 48% del número de nuevos cadetes femeninas respecto a datos del 2016, elevando a 13% el número de nuevas incorporaciones de mujeres piloto en easyJet.
La proporción actual de mujeres piloto también afecta a los datos de diferencia salarial entre hombres y mujeres publicados recientemente por la compañía. La brecha salarial entre géneros de la aerolínea británica alcanzó el 50% en 2017. Si no se realiza un análisis más profundo de los datos, esta información puede llevar a una lectura equivocada. La diferencia salarial en easyJet no es consecuencia de que se pague menos a las mujeres que a los hombres sino que el grupo laboral que recibe mayores retribuciones salariales, el colectivo de pilotos, está descompensado en términos de igualdad de género. A medida que se incorporen más mujeres en el colectivo de pilotos, se reducirá la brecha salarial de la compañía ya que habrá una mayor presencia de mujeres en el colectivo con los salarios más elevados.